Cantidad de roca viva a colocar en un acuario de arrecife
La cantidad promedia de roca viva a colocar en un acuario de arrecife es una libra ~ libra y media por cada galón de agua (1 lb -1.5 lb/galón) lo que equivale a 0.45 kg – 0.68 kg de roca viva por cada 4 litros de agua que contenga el acuario. El acuario que vamos a utilizar tiene 30 galones o 120 litros de capacidad, y en teoría 30 o 45 kilos de roca viva, serían suficiente para el acuario.
Las reglas nos indican que solo deberíamos de colocar: 1 pulgada de pez por cada 5 galones o 20 litros de agua que contenga el acuario (1 in/20L) . Según esta regla solo podríamos tener 6 peces de 1 pulgada (2.5 cm) o 3 peces de 2 pulgadas (5 cm).
Que yo recuerde, jamás he visto que coloquen tan solo 3 peces marinos en 120 litros de agua, y cuando tuve la oportunidad de administrar tiendas de animales, hace ya muchos años atrás, colocaba hasta 30 o 40 peces en ese mismo volumen de agua (con la ayuda de filtros biológicos húmedos + otros equipos). Nuestra meta en este acuario de arrecife, será colocar como mínimo 20 peces de 1 o 2 pulgadas, y algunas anémonas, corales e invertebrados, etc. La carga biológica en el acuario de 120 litros será pesada, y no habrá margen para errores en un espacio o volumen tan reducido de agua, así que tendremos que agregar aproximadamente 60 kilos de roca viva de alta porosidad, de la mejor calidad que podamos conseguir.
Roca viva
Cuando se habla de “roca viva”, no nos referimos a una roca en el sentido literal de la palabra. Una roca viva no es una roca, y tampoco puede estar viva, como todos sabemos. En el hobby de los acuarios marinos o acuarios de arrecife, para ser más específico, una “roca viva” es referida como un trozo de coral petrificado compuesto por carbonato de calcio, y habitado por micro y macro organismos marinos.
Las rocas vivas son restos de los corales petrificados o fosilizados, que están colonizados por microorganismos marinos, compuestos mayoritariamente por gusanos tubíferos, crustáceos, esponjas, algas coralinas y macroalgas. En ocaciones las rocas pueden contener pequeños brotes de corales blandos y corales calcáreos del género (SPS), y pueden estar colonizadas también por bacterias nitrificantes o aeróbicas, y bacterias anaeróbicas en el interior de las rocas. Se dice entonces que la roca está “viva”, por la gran cantidad de organismo que habita en su superficie y en su interior.
Las rocas vivas más reconocidas por su calidad provienen del sur del Pacífico, y normalmente se le da el nombre de la región de donde provienen, ejemplo: Fiji; Tonga; Marshall Island, etc. Las rocas vivas provenientes del Golfo de California o “Mar de Cortés ” son también reconocidas por su alta calidad.
Aparte del Pacífico, otras regiones pueden contener también rocas vivas de buena calidad. El Mar Caribe por ejemplo, contiene rocas vivas de alta calidad, debido a la abundancia de microorganismos que habitan en esas aguas, pero las piezas tienden a ser de formas robustas y son difíciles para armar o apilar sin que se caigan. Para solucionar el problema, se puede optar por colocar una sola pieza de roca viva que pueda acomodarse en el interior del acuario, pero estas piezas son por lo general difíciles de conseguir y transportar, y debido a ello, su precio puede ser bastante elevado en comparación a las otras rocas.
Calidad de las rocas vivas
Las rocas vivas de buena calidad deberán de ser livianas con estructuras internas de baja densidad, y deberán de tener formas irregulares con hendiduras o huecos, que permitan el paso de corrientes o flujos de agua a través de su estructura.
Nota: Las rocas vivas son de origen orgánico o animal, y significa que son esqueletos fosilizados de corales compuestos por carbonatos de calcio. Las rocas vivas no son de origen geológico, así como tampoco son hechas por el hombre. Estas dos últimas podrán tener una apariencia similar a las rocas vivas cuando son vistos por fuera, pero la cantidad de microorganismos que pueda albergar en su superficie es limitada, y su interior es compacto y totalmente inútil para realizar funciones biológicas dentro del sistema.